This content is hosted by YouTube, and you did not accepted our functional cookies, you can change your cookie settings and allow functional cookies in order to see this content.

Cookie Settings

Ruta de Fado

Visite los barrios típicos del Fado y descubra lugares inolvidables.

Largo do Intendente

Punto de Interés

Era un espacio degradado de la ciudad, pero tras su recuperación, se transformó en un pequeño aparador de la Lisboa más castiza. Delimitado por edificios revestidos con azulejos, uno de ellos, el de la antigua fábrica de azulejos Viúva Lamego, es simplemente deslumbrante. Tiene un hostel, terrazas, una fuente, canteros y ambiente de noche y día.

Mirador de Santa Catarina

Mirador

El Mirador de Santa Catarina, también conocido como Mirador de Adamastor, debido a la estatua que allí se encuentra y que representa ese monstruo marino, goza de una excelente vista sobre el Tajo. Está situado junto al barrio de Bica, en plena zona Baixa de Lisboa. Dispone de terraza y está abierto las 24 horas del día. Excelente para momentos románticos.

Ascensor de Glória

Punto de Interés

Realiza la conexión entre la Plaza de los Restauradores, en la zona de Baixa de Lisboa, y el Barrio Alto.

Mercado da Ribeira

Punto de Interés

Está situado en la zona ribereña de Lisboa. Datado del 1882, en sus orígenes, fue el mercado más importante de abastecimiento de la ciudad. Más tarde, se transformó en un mercado de venta al por menor y, recientemente, en un centro gastronómico y cultural. En la planta baja, se pueden degustar los aperitivos tradicionales portugueses, pero también cocina de fusión de la autoría de chefs de renombre. El piso de arriba, además de ser un famoso restaurante, dispone de un espacio para eventos culturales. El mercado tradicional aún funciona, por las mañanas. Todos los domingos, se realiza una feria de coleccionismo.

Mirador Sophia de Mello Breyner Andresen

Mirador

El Mirador Sophia de Mello Breyner Andresen está situado en Graça, un barrio antiguo de Lisboa encima de una de sus siete colinas. Goza de una vista privilegiada del castillo y de toda la Baixa de Lisboa. Con pinos piñoneros, árboles típicos de la flora mediterránea, bancos públicos y también una agradable terraza, es uno de los puntos de parada obligatorios para quien visita Lisboa.